16 oktober 2008

La “Caravana de la Muerte”

Después de 35 años, condenan a General que encabezó la “Caravana de la Muerte”












Recorrió el país en octubre de 1973 asesinando a más de 120 opositores al régimen

Una de las actuaciones más significativas de la Caravana de la Muerte fue la que tuvo lugar en Calama. Allí, 26 prisioneros fueron elegidos al azar, de una larga lista de detenidos, y llevados a las inmediaciones de la ciudad

Santiago de Chile, 15 oct. Tribuna Popular TP.- La Segunda Sala de la Corte Suprema condenó hoy a seis años de presidio al general retirado del Ejército Sergio Arellano Stark, por los homicidios calificados de los ciudadanos chilenos, Teófilo Arce Toloza, José Sepúlveda Baeza, Leopoldo González Norambuena y Segundo Sandoval Gómez en la investigación del episodio San Javier, ciudad del sur de Chile) del caso denominado Caravana de la Muerte.

La decisión la adoptaron en un fallo dividido los los ministros Jaime Rodríguez, Rubén Ballesteros, Hugo Dolmestch, Carlos Künsemüller y el abogado integrante Juan Carlos Cárcamo, luego de acoger un recurso de casación presentado contra el fallo de la Corte de Apelaciones de Santiago.
La misma condena recibió el oficial retirado Carlos Romero Muñoz, quien en la fecha de los acontecimientos tenía el grado de mayor y se desempeñaba como fiscal militar de Linares, 7ª Región.
También fueron condenados, a cuatro años de cárcel con el beneficio de la libertad vigilada, José Parada Muñoz y Julio Barrios Espinace.
En tanto, el máximo tribunal absolvió a Claudio Lecaros Carrasco y a Gabriel del Río Espinoza.

LA CARAVANA DE LA MUERTE

La Caravana de la Muerte es el nombre que recibió un escuadrón del Ejército de Chile que recorrió el país en octubre de 1973, tras el golpe militar de Augusto Pinochet, asesinando a más de 120 opositores al régimen. Sus objetivos inmediatos fueron los miembros del Partido Socialista de Chile, aún cuando también ejecutaron a militantes del MIR, del Partido Comunista de Chile y a ciudadanos sin ninguna vinculación política.

Entre los miembros de la "caravana" se encontraban dos soldados de infantería y varios oficiales del Ejército como el general de brigada Sergio Arellano Stark, el teniente coronel Sergio Arredondo González (más tarde director de la Escuela de Infantería), el mayor Pedro Espinoza Bravo, un oficial de Inteligencia del Ejército (más tarde jefe de operaciones de la policía secreta DINA), el capitán Marcelo Moren Brito (después comandante de Villa Grimaldi, el campo de torturas) y el teniente Armando Fernandez Larios (más tarde un agente de la DINA e involucrado en el asesinato de Orlando Letelier).

El grupo viajaba de prisión en prisión en un Helicóptero Puma, ejecutando a prisioneros políticos con armas pequeñas y armas cortantes. Las víctimas eran luego enterradas en tumbas sin marcar. Sin embargo, en el norte de Chile, los asesinatos se hicieron más cruentos, pues se dio paso a fusilamientos masivos y ocultamiento de cuerpos en el desierto.

Una de las actuaciones más significativas de la Caravana de la Muerte fue la que tuvo lugar en Calama. Allí, 26 prisioneros fueron elegidos al azar, de una larga lista de detenidos, y llevados a las inmediaciones de la ciudad. Tras flagelarlos, la comitiva militar procedió a fusilarlos y a enterrarlos en una fosa clandestina con el objeto de hacerlos desaparecer.

SENADOR SOSTIENE QUE VICTIMAS DE CARAVANA DE LA MUERTE HOY PUEDEN TENER JUSTICIA

Las víctimas de la denominada “Caravana de la Muerte” después de 35 años empiezan finalmente a recibir justicia, dijo Senador Jaime Naranjo.
El Senador Jaime Naranjo valoró “la condena a 6 años de presidio perpetuo efectivo por parte de la Segunda Sala de la Corte Suprema a Sergio Arellano Stark, por su participación en la ejecución de Teofilo Arce Toloza, José Sepúlveda Baeza; Leopoldo Gonzalez Norambuena y Segundo Sandoval Gómez, en la localidad de San Javier”.
Naranjo expresó que es muy importante que Arellano Stark, quien dirigió la caravana de la muerte que recorrió nuestro país durante septiembre y octubre de 1973, ejecutando sumariamente a decenas de personas, finalmente haya sido condenado a prisión efectiva sin beneficios.
“Es un hecho histórico. Podemos afirmar que después de más de 35 años las víctimas y los familiares de quienes fueron ejecutados durante la denominada Caravana de la Muerte, finalmente logran justicia. Además, la verdad se comprueba judicialmente, es decir, que se trató de homicidios calificados y premeditados, que buscaban no solamente eliminar a partidarios del Presidente Allende, sino generar el terror en la población”, aseveró Naranjo.
“Hago un llamado al Comandante en Jefe del Ejército, general Izurieta, a retirar los privilegios de los cuales goza como general retirado Arellano Stark, ya que ha sido condenado por sentencia firme y ejecutoriada de la Corte Suprema. Este es el menor gesto que debe realizar el ejercito hacia las víctimas de la Caravana de la Muerte”.

Bron: Tribuna Popular